San Martin (SJ) 2-0 Independiente

Independiente es un equipo bipolar. Oscila entre la euforia desmedida por ganar partidos sin fuste y a la fecha siguiente vuelve a perder y a sumergirse en rumores de alejamientos que llevan a hablar de objetivos distintos. Este es el caso del encuentro de hoy, donde el equipo no demostró nada ante un San Martín de San Juan que quiere pelear hasta el final para intentar la quimera de salvarse del descenso.
El conjunto de Troglio salió perdiendo desde el vamos. Iba apenas un minuto, cuando Gioda, en un garrafal error, quedó pagando y el intratable Bravo ingresó por el hueco para definir al gol. Este tanto cambió todo lo que se planeó en el partido para ambos.
Es que Independiente se vio obligado a salir más de lo esperado y el local, se serenó más, pese a haber salido con tres delanteros a la cancha. Allí, con la obligación del Rojo por hacerse cargo del partido se expusieron varias falencias de los de Troglio: falta de control de la pelota, imprecisión a la hora de jugar a un toque y, sobre todo, falencias defensivas.
Una de ellas le costó al visitante el segundo gol del local. Fue en una jugada simple. Córner y cabezazo de Tonelotto, el hombre a marcar, que fue a su encuentro con el gol libre. Con la chapa 2-0 todo se hizo demasiado cuesta arriba para un equipo que ante la adversidad suele claudicar. Para el final de la primera etapa, Pompei salvó de la catástrofe al invalidar un gol de tiro libre de Recalde por supuesto off side de Tonelotto.
El golpe de efecto lo intentó Troglio con la inclusión de Pato Rodríguez y Calello en la segunda parte. Los chicos de la cantera no alcanzaron para cambiarle la cara a un equipo empecinado en entrar por el medio y sin precisión. De hecho, Independiente no tuvo una sola jugada clara para descontar.
Los locales se abroquelaron atrás, apostaron por la contra y la impotencia del ataque visitante. El negocio les salió redondo y sellaron un triunfo sin atenuantes.
La ilusión de salvarse persiste en San Juan. No será fácil, pero si logra hacerse fuerte de local tiene chances. En cambio, Independiente regresará a vivir una semana de opiniones y rumores como no hace mucho le tocó atravesar.